Entrevista a Antonio Martínez de Bujanda, director de ANEL y vicepresidente de Cecop
Ucomur celebró recientemente una jornada sobre sectores emergentes y buenas prácticas que contó con un ponente de excepción. Antonio Martínez de Bujanda es director de ANEL (Asociación de Empresa de Economía Social de Navarra) y vicepresidente de Cecop (Confederación Europea de Cooperativas Industriales y de Servicios), en representación de Coceta (Confederación Española de Cooperativas de Trabajo). Durante su conferencia, Martínez de Bujanda ensalzó los valores cooperativos y de la economía social, y describió de un tipo de liderazgo clave para el éxito empresarial: el liderazgo participativo. Hablamos con él de esta y otras cuestiones tras su paso por la Región de Murcia.
¿Qué ventajas tiene el liderazgo participativo sobre un estilo más directivo?
La cultura de la empresa y el estilo de liderazgo como parte de dicha cultura son elementos clave para conseguir una diferenciación sostenible en el mercado. Es posible que otros modelos de liderazgo permitan conseguir buenos resultados en el corto plazo, sin embargo cuando lo que se persigue es un proyecto empresarial sostenible en el tiempo, se requiere el compromiso de las personas con el proyecto empresarial, aquí es donde el estilo de liderazgo juega un papel determinante.
Por otro lado, una de las cosas más difíciles es el trabajo en equipo y el liderazgo participativo sienta unas bases muy sólidas en este sentido. Se trata de un equipo en el que todas las personas participan y realizan una aportación positiva al conjunto desde su rol específico, un modelo de liderazgo que favorece el empoderamiento de todas las personas, que genera sentimiento de equipo.
¿Constituye el liderazgo participativo un elemento diferenciador para las empresas de economía social?
Las ventajas de la empresa de economía social residen precisamente en los valores del modelo. Compiten con las empresas convencionales en cualquier sector de actividad y se diferencian de las mismas por unos principios entre los que se encuentran la participación y la cooperación, que tienen mucho que ver con una manera de hacer las cosas diferente.
Dos de los principios están relacionados con su propósito, son empresas con propósito de generar impacto positivo en las personas y en la sociedad. Los otros dos principios están relacionados con el cómo participan las personas socias, la gobernanza democrática de la empresa y la cooperación en un proyecto compartido. La clave es convertir estos principios en ventajas competitivas. El sentimiento de la persona socia trabajadora como propietaria y protagonista de un proyecto empresarial compartido es muy diferencial.
Es usted director de ANEL y vicepresidente de Cecop, ¿qué opinión le merece el momento que atraviesa la economía social tanto en España como en Europa?
Yo diría que es apasionante. La verdad que este doble papel me permite combinar una visión micro, muy pegada a la realidad y al día a día de nuestras cooperativas en Navarra, con una perspectiva más amplia y con una visión temporal de medio o largo plazo que es la europea, en un momento histórico para la Economía Social. Nunca hasta la fecha la Economía Social había tenido el reconocimiento y proyección que tiene ahora a nivel nacional en nuestro país y a nivel europeo, y estoy convencido de que vamos a vivir en los próximos años un salto cualitativo de la Economía Social muy importante. Lo más novedoso y transcendental es la ventana de oportunidad que se ha abierto a nivel europeo, con el Plan de Acción Europeo como elemento más representativo, pero no el único. En el sector de la Economía Social se respira una gran ilusión y ganas de remangarnos para aprovechar dar respuesta a esta oportunidad.
El año pasado ANEL cumplió cuarenta años al frente de las cooperativas y sociedades laborales de Navarra. En los próximos meses Ucomur y Ucoerm celebrarán también su cuarenta aniversario ¿Qué paralelismos ve entre el impulso al cooperativismo en Navarra y en la Región de Murcia en las últimas cuatro décadas?
Celebramos con mucho orgullo estos cuarenta años de ANEL, compartiéndolo con todas nuestras cooperativas y sociedades laborales, con todas las personas socias trabajadoras de las mismas, con las más de cuarenta organizaciones de Navarra que forman parte de nuestro ecosistema de cooperación para el desarrollo de la Economía Social de nuestra región. Como colofón recibimos la Medalla de Oro de Navarra que es el máximo reconocimiento otorgado por Gobierno de Navarra. Y aunque tenemos una inmensa tarea por delante, todo esto es debido a una labor desarrollada durante muchos años con una línea de trabajo y objetivos claros que se ha ido traduciendo en resultados de empleo, de emprendimiento cooperativo, de crecimiento de las cooperativas, etc.
Y sí, existe mucho paralelismo entre la estrategia y labor de impulso al cooperativismo en las regiones de Murcia y Navarra, dos regiones de referencia a nivel estatal y europeo en materia de cooperativismo, y no es casualidad. Ucomur y Anel mantenemos una estrecha colaboración desde hace bastantes años, hemos compartido todo lo que hacemos y cómo lo hacemos: buenas prácticas, herramientas, proyectos… Hemos aprendido los unos de los otros y compartimos las mismas claves para el fomento del cooperativismo, la acción institucional, la fuerte visibilidad, la apuesta por emprendimiento cooperativo, la cercanía y apoyo a las cooperativas asociadas y el compromiso con las organizaciones del sector de ámbito estatal y europeo.
¿Qué papel diría que juegan las cooperativas en ambos territorios? ¿Qué necesidades detecta a la hora de continuar impulsando este modelo?
En ambos territorios las cooperativas se han convertido en un sector empresarial consolidado y clave para el desarrollo económico y social de la Región de Murcia y de Navarra, por su contribución al emprendimiento, al empleo, a la cohesión territorial, al PIB de ambas regiones, a la transformación del modelo de hacer empresa… Es un sector en constante crecimiento.
El cooperativismo se enfrenta a los nuevos retos de la sociedad y busca aportar soluciones, como siempre ha hecho. Hablamos de la despoblación de las zonas rurales, la sostenibilidad ambiental o las plataformas digitales, por citar algunos de ellos. Son retos que se dan a nivel local y en ambos territorios.
Para seguir propiciando el crecimiento del cooperativismo y dar respuesta adaptada a estos nuevos retos se necesita seguir potenciando la colaboración público privada entre lo gobiernos regionales y las organizaciones representativas del cooperativismo, con una estrategia regional de Economía Social compartida. Hay que seguir potenciando el emprendimiento cooperativo, especialmente entre las personas jóvenes, aprovechar mejor el principio de cooperación entre las empresas de economía social como palanca clave para su crecimiento y diversificación.
¿Qué les diría a aquellas personas que tienen un proyecto en mente y están pensando en crear una cooperativa o una empresa de economía social?
Yo les aconsejaría que se acerquen a Ucomur, donde les van a atender maravillosamente, les van a hacer descubrir la cooperativa como modelo de emprendimiento, les van a acompañar en el proceso de desarrollo de su idea de negocio y les van a abrir las puertas a un ecosistema de empresas cooperativas del que van a poder formar parte y en el que se abrirán nuevas oportunidades.